Títol: Un reto por la ciencia
Edició: 2022
Categoria: Empresa
“Un reto por la ciencia” es un proyecto llevado a cabo por la Fundación SENER, en colaboración con el Grupo SENER, que tiene como objetivo fomentar las vocaciones científico-tecnológicas en el alumnado de ESO mediante el acercamiento de la ingeniería. La iniciativa consiste en exponer problemas reales de la sociedad relacionados con la ingeniería (retos) a los que el alumnado debe presentar soluciones. Los retos planteados, los problemas, son situaciones reales que se plantean en el día a día de una empresa como SENER. Posteriormente, las soluciones de los participantes son evaluadas por personas de SENER expertos en esas áreas de ingeniería. En la fase final, los participantes presentan sus soluciones ante un jurado formado por personas de SENER y colaboradores y se realiza una entrega de premios al mejor proyecto. La forma de acercarse a los centros educativos es a través de las personas de SENER, pues la iniciativa está destinada a que todas las personas de SENER lo lleven a los centros educativos donde estudian sus hijos, sobrinos o sus antiguos centros de estudios. De este modo, se crea una cercanía entre los alumnos y SENER, a través de sus personas, y se les ofrece un seguimiento a lo largo de todo el proceso.
Gracias a “Un reto por la ciencia” enseñamos al alumnado los problemas reales que nos afectan como sociedad, en nuestro día a día, y cómo se pueden solucionar a través de la aplicación de la ingeniería y la tecnología. Así, se les da una orientación de cuál puede ser su trabajo en el futuro, si deciden decantarse por una carrera técnica. De la misma manera, se presenta como un trabajo trasversal entre asignaturas, para que otros perfiles (que puedan ser no técnicos) puedan aportar su punto de vista, lo que fomenta el trabajo en equipo, la diversidad y la visión de conjunto de los proyectos desde diferentes ámbitos.
El proyecto comenzó en el primer semestre de 2021 con un piloto en tres colegios de Bilbao y Madrid, cercanos a personas de SENER, para poder comprobar si funcionaba correctamente y la iniciativa tenía buena acogida. En la edición celebrada han participado 11 centros educativos y, en la que se lanzará el próximo curso, están inscritos 23 centros educativos. El proyecto ha conseguido el sello Euskadi STEAM, como clasificado entre los 12 finalistas de los Premios STEAM Euskadi Sariak que concede el Gobierno Vasco y la Agencia Vasca de Innovación, Innobasque.
Jóvenes de 12, 13, 14 años, que se encuentran estudiando Enseñanza Secundaria Obligatoria. El motivo de elegir este colectivo y a esta edad es porque es justo antes de que elijan si desean cursar una rama de Bachillerato u otra. Nuestro objetivo es que dispongan de toda la información a su alcance y puedan elegir libremente si, el día de mañana, quieren estudiar una carrera técnica y dedicarse a una de estas profesiones.
Personas de SENER, que llevan este proyecto al colegio de sus hijos/as, sobrinos/as o sus antiguos centros de estudios.
De esta manera, se integra en la estrategia de la empresa una causa social, una necesidad de la sociedad, y para la que las personas pueden dedicar su tiempo y su experiencia.
Centros educativos pues, a través de “Un reto por la ciencia”, pueden hacer ver al alumnado cómo y de qué manera se aplican los conocimientos que están adquiriendo en las diferentes asignaturas.
“Un reto por la ciencia” surge tras la detección por parte del área de personal de SENER, Dirección de Personas, de la falta de perfiles técnicos, de la falta de ingenieros e ingenieras para poder incorporarlos como profesionales para trabajar en SENER.
Desde la Fundación SENER, en colaboración con SENER, pensamos que no se trata de un problema que surge en las universidades, donde los estudiantes ya han elegido las titulaciones que quieren cursar, sino que es una cuestión que hay que atajar desde mucho antes, antes de que los niños y niñas elijan las diferentes modalidades de Bachillerato: Artes, Ciencias y Tecnología, y Humanidades y Ciencias sociales.
De este modo, diseñamos la iniciativa de “Un reto por la ciencia” para orientarlo a los cursos de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO), justo antes de que empiecen el Bachillerato. A través de proyectos reales a los que los profesionales de SENER se enfrentan diariamente, se pretende explicar en qué consiste la ingeniería, qué labor desempeña en nuestra sociedad, qué problemas se solucionan con las diferentes áreas y disciplinas que abarca.
En definitiva, a través de planteamientos reales y de problemas cotidianos que nos afectan como sociedad, acercamos la profesión de ingeniería al alumnado y les mostramos cuál puede ser su trabajo el día de mañana si deciden decantarse por una carrera técnica.
La metodología empleada en “Un reto por la ciencia” pretende ser la misma que la utilizada en el proceso de innovación de SENER. Parte de la identificación de problemas, tanto de cliente como internos, a los que se pretende dar solución. Estos problemas se transforman en retos a los que tanto el alumnado como el personal de SENER tiene que dar respuesta mediante una idea y un pequeño proyecto. La diferencia se basa en que las ideas generadas por los trabajadores pueden llegar a convertirse en un producto o proyecto, mientras que las soluciones de los alumnos se quedan en la fase anterior. Además, los retos y los problemas que se plantean al alumnado están adaptados para que puedan ser entendibles y gestionables por su parte. A modo de ejemplo, en ediciones anteriores se han planteado retos relacionados con la reducción de huella de carbono, la mejora del transporte público, las smart cities, la reutilización de aguas residuales o las energías renovables.
Los participantes, alumnos y alumnas de los centros educativos, presentan sus ideas en formato de elevator pitch, es decir, se da a cada equipo 5 minutos para que expliquen su proyecto. En este caso, graban un vídeo de 5 minutos de duración para presentar su solución; para esto pueden utilizar cualquier recurso a su alcance, presentaciones de power point, infografías, su propia imagen… Además, se les solicita un plan de negocio reflejado en un ‘modelo canvas’.
Una vez presentadas las soluciones por parte de los participantes, son los profesionales de SENER, junto con los colegios, los encargados de valorarlos y decidir si pasan a la siguiente fase, la final. Esta final está planteada como una competición entre los colegios participantes en la que los equipos presentan su solución ante un jurado compuesto por personas de SENER especialistas en los retos planteados, así como otros colaboradores (asociaciones, empresas socias o administración pública). En esta misma final, se selecciona un equipo ganador y se concede un accésit. A lo largo de todo el proceso de creación de las soluciones, los profesionales de SENER están a disposición de los alumnos y alumnas y profesores y profesoras para resolver cualquier duda que pueda surgir a lo largo del proyecto.
Entre las variables evaluables del trabajo se encuentra la innovación, el plan de marketing o negocio o el trabajo en equipo.
Un reto por la ciencia se lleva a cabo a través de un programa de voluntariado corporativo de SENER, realizado a través de la Fundación SENER. Por lo tanto, son las personas de SENER las que se apuntan voluntariamente para participar en este proyecto y llevarlo al colegio de sus hijos, sobrinos o a sus antiguos centros de estudios. En total, en la última edición de Un reto por la ciencia, se ha contado con más de 15 personas voluntarias, tanto para llevar el proyecto a sus colegios como en la participación del evento final, evaluación de soluciones, etc. La próxima edición de Un reto por la ciencia (2022-2023), ya en marcha, cuenta ahora mismo con 26 voluntarios.
Además de las personas voluntarias que llevan el proyecto a sus colegios, existe un equipo de trabajo que gestiona el proyecto. Se trata de personas de plantilla tanto de SENER como de la Fundación SENER. Igualmente, se cuenta con el apoyo de los servicios de staff de SENER, que dan apoyo en momentos necesarios: equipo de Comunicación, Dirección de
Personas, Marketing, Motor de Innovación, Dirección Financiera o Asesoría Jurídica.
En cuanto a los recursos materiales, se ha tratado de minimizar el coste de estos y optimizar lo máximo posible esta partida con el objetivo de maximizar los premios y el material de difusión de la iniciativa. Así, se han utilizado presentaciones de power point, programas de edición de vídeo, Teams para las reuniones…
El proyecto está ideado para enmarcarlo en un semestre del curso académico. El proyecto se presenta a las personas de SENER y a los colegios en el mes de mayo-junio, con el objetivo de que puedan incluirlo los centros educativos en los programas de las asignaturas. Durante los meses de julio, agosto y septiembre se adaptan los retos que se plantearán a los estudiantes. En octubre se presentan en los colegios, por parte de las personas de SENER. En el mes de diciembre, los participantes presentan sus soluciones a los retos, estos son evaluados por parte de SENER y, una vez elegidos los mejores proyectos, se celebra la final entre colegios, prevista para febrero del año siguiente.
El proyecto ha tenido una gran acogida en los centros educativos, por parte de la Dirección de los centros, por parte de los profesores, por parte de las familias y por parte de los alumnos. De hecho, los tres colegios participantes en el proyecto piloto que se realizó en el primer semestre de 2021 han decidido volver a tomar parte en la iniciativa e incluirlo dentro del propio programa académico.
Igualmente, las personas de SENER han mostrado gran interés por participar en esta iniciativa y la Dirección de la empresa se encuentra muy comprometida con el apoyo a “Un reto por la ciencia” y el fomento de las vocaciones científico-tecnológicas entre los más jóvenes. No solo ha aumentado el número de personas interesadas en llevar el proyecto a sus centros educativos, también ha sido superior el número de personas que se han ofrecido voluntarios para participar en otros aspectos organizativos de la iniciativa, como en la evaluación de las soluciones que proponen los alumnos.
En cuanto al número de alumnos y alumnas participantes, en la edición piloto se llegó a 296 personas. En la última edición, han participado más de 570 alumnos. Esto nos hace llegar a un total de más de 1.000 alumnos y alumnas a los que se les explicar en qué consiste la ingeniería, la ciencia y la tecnología y se promueven las carreras STEM.
En cuanto la promoción del proyecto, tanto los pilotos como las ediciones posteriores, han sido comunicadas a través de los diferentes canales de comunicación del Grupo SENER y de la Fundación SENER (webs, notas de prensa, redes sociales, etc.). En concreto y a modo de ejemplo, el canal corporativo de SENER en LinkedIn cuenta con más de 127.000 seguidores con los que se ha compartido “Un reto por la ciencia”. Del mismo modo, se han facilitado los materiales para que los centros educativos los compartan a su vez en sus canales corporativos.
Igualmente, hay que destacar que el proyecto ha conseguido el sello Euskadi STEAM, ya que se ha clasificado entre los 12 finalistas de los Premios STEAM Euskadi Sariak que concede el Gobierno Vasco y la Agencia Vasca de Innovación, Innobasque. El sello y los galardones reconocen el trabajo de entidades que desarrollan actividades relacionadas con el fomento de vocaciones científico-técnicas y en carreras denominadas STEAM.
A la hora mejorar el proyecto, hemos introducido las lecciones aprendidas de los pilotos y la anterior edición.